jueves, 19 de mayo de 2011

Consejos para cuidar la piel a partir de los treinta

De los 30 a los 40 años la piel ya ha iniciado un proceso de regresión en la mayoría de los casos visible por uno mismo. La deshidratación cutánea unida a la oxidación provocada por el medioambiente, los malos hábitos o el propio envejecimiento cronológico son la causa de elastosis cutánea, piel apagada y primeras arrugas faciales.

El primer gesto para cuidar la piel a cualquier edad es una correcta higiene de la misma, liberándonos de la contaminación, maquillaje, polvo, etc. que impiden el paso de principios activos y oxigeno y el correcto intercambio de nutrientes a nivel más superficial.

Podemos potenciar el mismo con el uso de alfa-hidroxiácidos que ayudan a eliminar los puentes de los queratinocitos más desvitalizados y por tanto a deshacernos de la capa más superficial y envejecida de la epidermis. Puesto que la renovación de la misma se completa a las 3 o 4 semanas, lo ideal sería estimular la nutrición e hidratación de las capas más profundas con complejos elaborados con factor de crecimiento epidérmico autólogo, acido hialurónico y todos los oligoelementos y vitaminas necesarios para desarrollar con corrección los procesos metabólicos que ocurren en nuestra piel.

La propuesta que hicimos a Beatriz consistía precisamente en aportar salud y bienestar a su piel, consiguiendo un efecto de belleza natural y fresco.

EL tratamiento de limpieza, purificación de la piel ,desbloqueo energético y tonificación cutánea se realizó siguiendo las bases de la bioenergética, moxibustión y la aplicación de fórmulas que contienen extractos vegetales, vitaminas, sales y barros del Mar Muerto, aceites esenciales BIO y aguas florales,

El tratamiento no sólo se aplica en cara y cuello, sino en todo el cuerpo, pues la energía facial depende del conjunto corporal.

A continuación, el tratamiento con ácido láctico aplicado sobre la superficie cutánea ayuda a la renovación de la piel y la dota de luminosidad, minimiza las imperfecciones superficiales y estimula la hidratación intrínseca cutánea. El tratamiento se completó con una máscara de factor de crecimiento epidérmico vegetal que recupera la piel en 20 minutos.

Para culminar el tratamiento, la infiltración de los activos más redensificantes y estimulantes con la técnica Mesogloss logran reparar la oxidación cutánea y estimular la formación de colágeno, elastina, dotando a la piel de firmeza, color y brillo. Tras la aplicación de un fina capa anestésica tópica se introducen en la piel los principios activos en la propia dermis; siendo una técnica indolora, rápida y sencilla. A continuación se sella con máscara de factor de crecimiento epidérmico del propio paciente. En pocas horas recupera la hidratación y firmeza del contorno de ojos, boca y mentón; suaviza las marcas de cansancio y trata las finas arrugas desde el interior. En definitiva, salud y juventud.

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