martes, 7 de octubre de 2014

Todo sobre el Pre y Post Operatorio



Frente a una operación de cirugía estética, los tratamientos estéticos previos y posteriores mejoran los resultados, facilitan la recuperación y, en general, suponen un beneficio para el bienestar del paciente. Cuando un paciente opta por someterse a una operación de cirugía estética, la colaboración entre su médico y su esteticista resulta esencial: preparar la piel y el cuerpo con anterioridad facilita la operación, y la recuperación siempre es más rápida y efectiva con los tratamientos adecuados. Te contamos cómo:


Blefaroplastia

La cirugía estética en los párpados consiste en extraer las bolsas de grasa en párpados inferiores y en corregir la caída de los párpados superiores debido al exceso de piel y a la laxitud del músculo, características que hacen parecer estar cansado, tener más edad, y que incluso puede interferir en la visión. Antes de realizar una blefaroplastia es conveniente garantizar la oxigenación tisular para lograr una correcta cicatrización. Es importante abandonar el hábito del tabaco, al menos, dos semanas antes para garantizar la perfecta vascularización de los tejidos, así como evitar el consumo las 4 semanas posteriores. Una vez realizada la intervención, es esencial la eliminación del edema para evitar que la piel pierda turgencia. Ya retirados los puntos de sutura a los 4 o 5 días, se realizan drenajes linfáticos manuales faciales, que nos van a ayudar a eliminar el líquido acumulado y la inflamación. Tres semanas después se inician masajes sobre la cicatriz en sentido trasversal para evitar la formación de fibrosis. Los drenajes ayudan a la eliminación del hematoma, con el objetivo de evitar la hiperpigmentación cutánea posterior.


Lifting facial

Esta técnica quirúrgica consiste en tensar los músculos faciales, eliminando el exceso de grasa y redistribuyendo la piel de la cara y el cuello. Está aconsejado en pacientes con laxitud en cara y cuello, pero cuya piel conserva cierta elasticidad. La colocación de las incisiones varía mucho según la estructura facial de cada paciente. Para preparar la piel antes de la intervención, son aconsejables tratamientos tópicos faciales con factores de crecimiento epidérmico, agentes hidratantes, estimulantes de la formación de colágeno y elastina y oxigenantes para garantizar la correcta cicatrización de la piel.

Asimismo, los masajes circulatorios son de gran ayuda para asegurar la llegada de nutrientes a la piel a través de los vasos sanguíneos. Es obligatorio eliminar el tabaco un mes antes, ya que fumar afecta al comportamiento de las plaquetas y complica la coagulación. Una vez realizada la cirugía es importante controlar el edema y los hematomas. El drenaje linfático manual es el tratamiento principal a aplicar durante las 2 o 3 primeras semanas, ya que ayuda a la cicatrización del tejido, disminuye las molestias postoperatorias y acelera la recuperación. Esta técnica debe aplicarse a razón de una sesión diaria durante los primeros siete días, para pasar a días alternos en la segunda semana y al menos dos veces por semana durante dos semanasmás. 
A partir de las seis u ocho semanas, podemos introducir técnicas de masaje para reducir la cicatriz, como el pinzado rodado, los pellizqueos o el masaje en zigzag, que incrementan la elasticidad de la piel y desfribrosan la zona. A partir del décimo día podemos optar por los ultrasonidos de baja intensidad y frecuencia media, que disminuyen la fibrosis, aumentan la permeabilidad de las membranas celulares, y reducen el dolor y la inflamación.



Liposucción o laserlipólisis

Es una técnica quirúrgica utilizada para eliminar depósitos de grasa localizados en determinadas zonas
del cuerpo, tales como abdomen, nalgas, caderas, muslos, rodillas, tobillos, brazos, cuello y mejillas.

Previamente a esta intervención es recomendable preparar el tejido dérmico y subdérmico, para lo que se aconseja adoptar una dieta proteica con la que perder el exceso de peso si fuera necesario. Para conseguir reducir los tabiques fibróticos entre los adipocitos, se aconseja también un tratamiento con terapia subdérmica mecanizada. Tras la intervención, es habitual la aparición de fibrosis, sobre todo en los puntos donde se introduce la cánula. Esta fibrosis puede ser debida tanto al edema como a la posible necrosis de grasa que no se haya llegado a extraer, o a la formación de túneles donde se organiza tejido cicatricial. Para la prevención de la fibrosis postquirúrgica conviene realizar drenaje linfático manual lo antes posible. Las sesiones pueden comenzar en el momento en el que el cirujano lo indique, aproximadamente a partir del cuarto o quinto día tras la intervención, aunque en ocasiones puede ser al día siguiente. Se recomiendan alrededor de 10 a 12 sesiones, diarias durante la primera semana y posteriormente una o dos veces por semana. El uso de ultrasonidos disminuye la inflamación

y la viscosidad del medio intersticial, por lo que, utilizados tras dos semanas de la intervención, ayudan a la reabsorción del edema y a disminuir la fibrosis y los hematomas. Además del drenaje linfático manual, la presoterapia es un buen complemento a utilizar a partir del segundo día si así lo autoriza el cirujano, preferiblemente con equipos que permitan regular la presión por segmentos y elegir programas adecuados a cada caso. Otras posibles herramientas son la endermología y masaje de fricción, que puede movilizar acúmulos grasos y fibrosis mientras no se movilice la piel en exceso durante las primeras semanas, y la radiofrecuencia dual, que se puede utilizar a partir del tercer mes para mejorar el aspecto externo de la piel del área tratada y para compactar el tejido dérmico estimulando la formación de colágeno y elastina.



Cirugía mamaria

La cirugía mamaria es la intervención más común entre las mujeres, ya sea una mamoplastia de aumento, una reducción mamaria o una pexia (levantamiento de pechos caídos). Sea cual sea su abordaje quirúrgico, se produce rotura de tejidos (glandulares, musculares y cutáneos) y alteración de la irrigación sanguínea tras la electrocoagulación de los pequeños vasos sangrantes durante la intervención.


Previamente a la cirugía se aconseja abandonar el hábito tabáquico, pues es muy importante la correcta oxigenación del tejido manipulado. Además, garantiza la correcta cicatrización no sólo de las estructuras internas, sino también de la piel, evitando dehiscencia de suturas, cicatrices anchas, etc. También es aconsejable preparar la piel con un tratamiento nutritivo en cabina. El tratamiento postoperatorio va encaminado a la reabsorción y evacuación del edema postquirúrgico, el cual se acumula alrededor de las mamas y provoca una tensión muy molesta para la paciente. Después de la cirugía, cuando el cirujano lo considere, se iniciará tratamiento con drenaje linfático manual, realizando finos movimientos en lugares muy concretos de la anatomía de la mama y de la axila. Con estos drenajes conseguiremos desaturar el sistema linfático de sustancias de desecho, así como favorecer la eliminación de los fármacos utilizados durante la cirugía. Podemos complementar con la técnica de inducción miofascial, de gran poder relajante que trabaja esencialmente sobre el tejido fascial mamario, tan importante para el movimiento de los músculos, los órganos y la piel: mediante una sincronización entre las manos del profesional y la respiración del paciente lograremos movilizar tejidos profundos, que ayudarán al correcto asentamiento de las prótesis mamarias y a la formación de una cápsula de calidad. También podemos utilizar el vendaje neuromuscular, que consiste en la colocación de unas cintas adhesivas con unas direcciones y tensiones muy delimitadas dependiendo de la zona del cuerpo que se quiera incidir, proporcionando una mejora del edema de las mamas, de las cicatrices, y del movimiento implante-músculo pectoral, tan importante para que el resultado sea natural.



Abdominoplastia

La cirugía del abdomen es un procedimiento quirúrgico complejo de reconstrucción de la pared abdominal, que consta de la eliminación del exceso de piel y grasa (dermolipectomía), reposición de los músculos rectos anteriores de la pared abdominal, cierre cutáneo a nivel infraabdominal y recolocación del ombligo. Se puede acompañar de la liposucción de los flancos. Antes de la cirugía se aconseja una preparación de 3 a 4 meses. En el caso de que haya sobrepeso, se pauta un tratamiento dietético personalizado, preferiblemente una dieta proteica, para reducir materia grasa. Es fundamental la reducción del hábito tabáquico, porque el consumo influye de forma negativa en la proceso de cicatrización. También conviene realizar un tratamiento reafirmante con radiofrecuencia corporal, logrando un aumento de la circulación de la zona que permitirá mejorar el metabolismo, aumentar la formación de nuevo colágeno, y disminuir líquidos y toxinas. El número de sesiones que se recomienda es de 4 o 5, con una pauta cada 15 o 20 días.

Se aconseja asimismo hidratar al máximo la piel del abdomen para favorecer así la cicatrización. Hoy en día ya no se entiende la abdominoplastia sin un tratamiento posterior de drenajes linfáticos, que pueden ser manuales o mecanizados. Se recomienda comenzar a los 15-20 días después de la cirugía, y realizar primero drenajes linfáticos manuales, debido a la inflamación y mayor sensibilidad de la zona que hay inmediatamente después de la cirugía. De esta manera se consigue la activación del líquido acumulado en los tejidos, mejorando así el edema y la inflamación posterior, y creando una sensación de bienestar gracias al efecto neurosedante de este tratamiento. Pasados dos meses se puede seguir con los drenajes manuales o pasar a la presoterapia, que realiza un drenaje linfático mecanizado mediante unas botas neumáticas que van realizando presión a diferentes niveles, consiguiendo también la eliminación del líquido acumulado. Para acelerar la cicatrización y mejorar el aspecto de las cicatrices, se recomienda un tratamiento tópico con cremas regenerantes-eestructurantes cutáneas hasta seis meses después de la cirugía.

Dra. Cristina de las Heras y Dra. Eva Hidalgo

Co-directoras de H&H Medicina Estética
http://www.hhmedicinaestetica.es/

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